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CURSO CORTO REGISTRO HOSPITALARIO DE TUMORES ISONOMÍA Y CÁNCER JM Sanz Anquela (1), A
Castaño Pascual (2) y P Martínez Onsurbe (1) La isonomía o isonimia es el estudio de la frecuencia y distribución de apellidos en poblaciones humanas, mediante el cual pueden establecerse relaciones de parentesco y origen. Aunque "isonomía" sería un término más adecuado por estar el correspondiente sufijo griego "onomas" relacionado con "hogar, origen, descendencia, raíz, tronco", como consecuencia de fenómenos fonético linguísticos de disimilitud, al inglés se ha traducido como "isonymy" y por extensión, en castellano "isonimia" ha quedado sancionado por el uso, siendo el término utilizado por la práctica totalidad de publicaciones. Dado que no sólo heredamos genes, sino también apellidos, los métodos isonímicos que analizan la composición de apellidos en una población, proporcionan una válida información de la estructura genética de la misma y constituyen un instrumento habitual en estudios de dinámica evolutiva de poblaciones humanas, formando parte de programas de doctorado en departamentos de Antropología (1). Una población con poca diversidad de apellidos traduce un reducido "parque genético" que representa un mayor riesgo de homocigosidad. La homocigosidad que subyace a la búsqueda selectiva del cónyuge con variables grados de parentesco natural se denomina consanguinidad. La homocigosidad que subyace a la búsqueda selectiva del cónyuge en el mismo grupo de población de una pequeña localidad o comarca, se conoce como endogamia. El estudio de los apellidos para el análisis de la consanguinidad se remonta a 1875, cuando George Darwin, padre del famoso naturalista Charles Darwin, publica el primer trabajo conocido sobre el tema. No obstante, el primer aporte metodológico relevante procede de un trabajo de Crow y Mange en 1965, en el que se establece la metodología básica para el cálculo de la consanguinidad de una población a partir de listas de apellidos (2). En el análisis de poblaciones, los cálculos de isonomía representan un método fiable para detectar fenómenos migratorios (3). Las áreas de inmigración presentan una gran variabilidad génetica y de apellidos, mientras que las de emigración suelen tener mayor proporción de apellidos repetidos con elevados índices de isonimia, y las condiciones de aislamiento de estas poblaciones han favorecido históricamente situaciones de endogamia (4). La estructura genética de distintas poblaciones ha sido evaluada en múltiples estudios de isonomía (3-10). En algunos, se han comparado los resultados con los obtenidos en el laboratorio mediante el análisis de polimorfismos genéticos (8-10). Dado que la adquisición de apellidos es un fenómeno relativamente reciente respecto de la evolución de nuestro genoma (10), los cálculos de isonimia superan en eficacia a sofisticadas técnicas de genética molecular en la detección de fenómenos recientes de migración (8); mientras que para migraciones muy antiguas son preferibles, por ejemplo, técnicas moleculares para el análisis de frecuencias alélicas del sistema HLA (10). Obviamente, entre los aspectos de interés antropológico de las poblaciones, evaluables por técnicas isonímicas, figura la salud de las mismas. Se han detectado tasas más altas de mortalidad en edades prerreproductivas en poblaciones con elevado grado de consanguinidad tanto en España (11-12), como en otros paises (13-14). La consanguinidad se ha relacionado con mayor riesgo para algunas enfermedades y entre ellas el cáncer. Estudios realizados en poblaciones aisladas con elevado grado de consanguinidad en 5 islas croatas, han encontrado una incidencia global del cáncer más elevada y especialmente de carcinoma vesical en hombres y de cáncer de mama, ovario, SNC y colorectal en mujeres (15). Sería esperable que la aparición del cáncer fuese más precoz en grupos de población con elevados índices de isonomía respecto de otros con mayor diversidad genética, ya que la homocigosidad para los factores genéticos responsables de un mayor grado de susceptibilidad al desarrollo de tumores, condicionaría una reducción del periodo de latencia de carcinogénesis. También sería coherente encontrar elevados índices de isonomía en pacientes con tumores primarios múltiples. No obstante, los estudios realizados en registros de tumores de población escocesa no han obtenido los resultados esperados (16-17) , posiblemente por la limitación de la población anglosajona para este tipo de estudios, ya que en población croata sí se encontraron índices isonímicos más elevados en los grupos con cáncer de aparición precoz (15). En un estudio más reciente y circunscrito a la isla croata de Lastovo, también se detectó mayor grado de isonomía en las mujeres con cáncer respecto de la población sin cáncer, con elevaciones significativas de los índices isonímicos en tumores cerebrales y leucemias, además de ovario y mama (18). Paradójicamente, otros autores han encontrado tasas de incidencia más baja de cáncer de mama en familias con elevada consanguinidad que podrían explicarse por fenómenos de homocigosidad para determinados genes supresores de tumores (19). La mayor parte de los estudios sugieren que la participación de factores genéticos parece ser variable de unas a otras localizaciones tumorales : en el cáncer de próstata y colon participarían más factores genéticos que en el cáncer de vejiga, mientras que el cáncer de estómago y recto ocuparían una posición intermedia (20). El cáncer de labio y glándula salival podrían tener un componente hereditario importante, a juzgar por los resultados de algunos estudios de isonomía (21). El cáncer de pulmón en hombres y las leucemias en ambos sexos, parecen relacionarse con oncogenes recesivos en estudios de homocigosidad mediante técnicas combinadas de análisis isonímico (22). En España sólo tenemos conocimiento de aplicación de técnicas isonímicas en cáncer en dos registros hospitalarios de tumores de Soria y Zaragoza (23) y en el registro de cáncer de base poblacional del País Vasco (24). La provincia de Soria es una región geográfica de alto riesgo de cáncer gástrico atribuible a factores dietéticos (25), pero el elevado índice de isonimia de Lasker en población soriana con cáncer de estómago (23), hace sospechar un componente etiológico de homocigosidad. En la provincia de Álava (24), mediante análisis de "cluster" aplicado a isonimia en la búsqueda de parentesco genético entre mujeres con cáncer en diferentes localizaciones anatómicas, se detectó una agrupación formada por mama, endometrio, ovario, cérvix y linfoma; y una segunda agrupación de carcinoma colorectal y tumores encefálicos. Otro aspecto interesante de este tipo de estudios es la identificación de apellidos de riesgo. El apellido representa un marcador de individualidad genética, especialmente útil en apellidos raros (frecuencia inferior al 1 por 1000). Determinados polimorfismos genéticos del sistema HLA se asocian con apellidos vascos (26), y se han identificado apellidos que podrían representar un factor de riesgo para ciertas enfermedades, entre ellas, algunos tipos de cáncer (22). Pero no solamente hay apellidos que pueden representar un riesgo de cáncer, sino que otros podrían estar relacionados con una protección frente al desarrollo de determinados tumores malignos, por su asociación con genes supresores de tumores (27). La metodología de análisis matemático de los estudios de isonimia se encuentra actualmente en pleno desarrollo. Desde hace no más de 4 décadas, estamos asistiendo a la creación de un cuerpo doctrinal que está permitiendo estudiar y comprender de un modo científico fenómenos sociológicos o antropológicos, como la migración de poblaciones, o su grado de endogamia. El marco metodológico está fundamentado en el análisis de la diversidad de apellidos. Esta diversidad además traduce el grado de riqueza o pobreza genética de la población (homocigosidad), por lo que su análisis ha podido ser aplicado a estudios sociosanitarios, como por ejemplo la mortalidad infantil asociada al grado de consanguinidad de los padres, etc. De este modo se va enriqueciendo progresivamente el conjunto de conocimientos de este nuevo cuerpo doctrinal. Las fuentes de información utilizadas habitualmente han venido siendo los registros civiles y eclesiásticos, que se convierten así en verdaderas joyas testimoniales de la evolución de los grupos humanos. La genética constituye una de las disciplinas de mayor desarrollo en los últimos años. Las enfermedades de herencia mendeliana producidas por una única mutación presentan una baja prevalencia, pero las denominadas "enfermedades de herencia compleja", en las que los factores ambientales interactúan con factores de predisposición genética en modelos multicausales, como sucede con el cáncer y enfermedades degenerativas del SNC, son extraordinariamente frecuentes. Como características de herencia compleja figuran: Penetrancia reducida de los factores de predisposición genética. Participación de agente ambiental desencadenante. Heterogeneidad genética (varios genes pueden causar la misma enfermedad). Pleiotropismo (la misma mutación produce diferentes manifestaciones clínicas). Epístasis (se precisa el efecto de 2 o más genes para que aparezca la enfermedad). La metodología para discernir el componente genético de enfermedades complejas incluye, entre otros, a los estudios de agregación familiar en los que son aplicables técnicas de isonimia (28). No cabe duda de que estas técnicas son mucho más baratas que cualquier otra metodología relacionada con estudios genéticos, por lo que peyorativamente han sido denominadas "la genética de los pobres". Pero su bajo coste no está reñido con los resultados prácticos que puede proporcionar y son los registros de tumores una de las mejores fuentes de información para estudios de isonomía y cáncer. El primer problema que se plantea en la ejecución de un estudio sobre isonomía y cáncer, es el de la confidencialidad. La ley de protección de datos prohibe el manejo de ficheros con campos por los que se pueda identificar a un paciente. Este problema se soluciona con la codificación de los apellidos mediante pseudónimos (29). Dado que se va a trabajar con apellidos, resulta más gratificante asignar a cada apellido un vocablo con determinado significado que un frío código. Los nombres latinos de género y especie de los distintos seres vivos, son buenos candidatos para pseudónimos de apellidos, dado su carácter internacional. Con 23.000 apellidos distintos se pueden apellidar hasta 250.000 habitantes de Madrid (30) y el correspondiente fichero decodificador en DBF, con 2 campos de 30 caracteres cada uno, cabe holgadamente sin comprimir en un disquete de 1,4 MB. Otro problema que podría plantearse es el de la propiedad intelectual del apellido, no obstante cuando la explotación de los datos redunda en un beneficio para la sociedad, prevalece este criterio y un informe favorable de la correspondiente Comisión de Investigación para la realización del estudio puede ser suficiente. Cuando, como patólogos, nos embarcamos en estudios epidemiológicos de cáncer, uno de los recursos más importantes de que disponemos son los registros de tumores, tanto de base poblacional como hospitalarios. Son instrumentos de salud pública e inagotables fuentes de datos que tenemos a nuestro alcance. Recogen información oncológica de la población que vive en una determinada área geográfica o que es atendida por una determinada institución sanitaria, ayudando en la planificación y evaluación de las acciones de salud. De la información acumulada, no sólo podemos extraer datos de incidencia, tendencias o evaluación de la calidad asistencial, sino que incluso podemos identificar grupos de riesgo genético mediante la utilización de los datos de filiación. Los estudios de isonomía aplicados a la epidemiología oncológica pueden aprovechar el esfuerzo volcado en el registro continuo de los casos de cáncer de una población. BIBLIOGRAFÍA 1.- Vicente Fuster. Dinámica evolutiva de las poblaciones
humanas. Departamento de Biología Animal I (Antropología). Tercer ciclo.
Universidad Complutense de Madrid. www.ucm.es/info/antropo/dinamica.htm 30.- JM Sanz, C Cuchí, MP Sanz-Moncasi , T Cuchí, JM
Ruiz, JA Giménez-Mas y A Zubiri. Calidad y confidencialidad de la
información en Registros de Tumores: Codificación de nombre y apellidos.
Comunicación presentada en la XXème REUNION DU GROUPE POUR L’EPIDEMIOLOGIE
ET L’ENREGISTREMENT DU CANCER DANS LES PAYS DE LANGUE LATINE. Lyon, mayo
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© SEAP. Sociedad Española de Anatomía Patológica | Actualizado: 09/07/2003 |